El Ayuntamiento vigilará que las perturbaciones por ruidos no excedan los límites que marca la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente

El Ayuntamiento de Cuenca, a través de la Concejalía de Medio Ambiente, trabaja para conseguir que las perturbaciones por ruido no excedan los límites que establece la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente y se ha marcado como objetivo reducir el número de denuncias por ruidos que en los primeros seis meses de 2008 ascendieron a 16 y durante los años 2006 y 2007 llegaron a las 35 y 36 denuncias respectivamente.
Las principales causas de las denuncias formalizadas en estos tres últimos años son las molestias que provienen del ocio nocturno seguidas de los ruidos provocados por maquinarias como aparatos de refrigeración, ascensores o puertas de garaje, los ruidos derivados de las actividades domésticas y, por último, las denuncias por las molestias que causan las obras de edificaciones.

Causas
En cuanto a la primera de las causas de las denuncias, la de ocio nocturno, indicar que se ha pasado del incumplimiento de las medidas correctoras de aislamiento acústico de los locales a las molestias que originan grupos de personas a altas horas de la madrugada al entrar y salir y consumir en los alrededores. También han aumentado las quejas por ruidos de aparatos de música o televisión en las terrazas.
Por lo que respecta a las denuncias derivadas de los ruidos provenientes de cámaras frigoríficas, aparatos de aire acondicionado, ascensores o puertas de garaje el concejal responsable de Medio Ambiente, Ángel Mariscal, ha indicado que "si se trata de actividades molestas o de maquinaria recogidas en la Ordenanza y que no cuentan con autorización medioambiental o que incumplen los límites máximos, se abre un expediente sancionador y se mide el ruido. En algunos casos es conveniente comprobar si la vivienda cumple con las normas de aislamiento acústico de la edificación".
Las denuncias entre vecinos se deben normalmente a situaciones puntuales que suelen registrarse de madrugada como fiestas, discusiones, elevado volumen de los aparatos de música y que cesan con la presencia policial.
Cuando el problema es persistente suele deberse a molestias causadas por ruidos de animales como ladridos de perros e instrumentos musicales. "En estos casos los vecinos afectados recurren normalmente al Ayuntamiento que en primer lugar lleva a cabo la notificación para intentar resolverlo. Si no se resuelve de forma amistosa la comunidad de vecinos debe actuar por iniciativa propia o a petición del vecino presentando una demanda y pidiendo de forma cautelar el cese de la actividad", señala Ángel Mariscal que recuerda que las relaciones de vecindad vienen reguladas en la Ley de Propiedad Horizontal y en el Código Civil.
El concejal de Medio Ambiente advierte que, en los casos más graves, se puede privar al infractor del derecho al uso de la vivienda o local de forma temporal "e incluso podrían derivar acciones penales contra los infractores".
Por orden de importancia la última causa que provoca denuncias por molestias de ruidos se sitúa en las obras de edificios como consecuencia de la presencia de hormigoneras, maquinaria, carga y descarga de material a horas tempranas o en fines de semana.

Programas de seguimiento
El borrador de Ordenanza de Convivencia Ciudadana recoge que todos los ciudadanos están obligados a respetar el descanso de los vecinos y a evitar la producción de ruidos que alteren la normal convivencia, la tranquilidad o el descanso. Se prohibirá el lanzamiento de artefactos pirotécnicos y la producción de ruidos desde vehículos. “Este verano han llegado quejas por coches discoteca en las explanadas de El Serranía”.
Desde la Concejalía se pondrán en marcha programas de seguimiento continuo para vigilar el cumplimiento de las autorizaciones, las medidas correctoras de actividades y de maquinaria molesta, así como el cumplimento de los horarios de cierre. También se avisará a denunciantes y denunciados de los derechos y obligaciones de los vecinos.
A esta cifra hay que sumar los atestados de la Policía Local, por infracciones del Reglamento General de Circulación y la Ordenanza de Tráfico y Circulación de Vehículos a Motor. Incluso la Ordenanza de Medio Ambiente prohíbe la circulación de vehículos a motor sin silenciadores o con silenciadores inadecuados o que produzcan ruidos superiores a los fijados.