sábado, 1 de noviembre de 2008

Articulo de Opinión

Estimado e ínclito Señor Catalá:


Lo cierto es que me sorprende ver que ha encontrado unos minutos para dirigirse a mí, a pesar de no estar usted liberado, circunstancia que le impide asistir a los actos culturales, como usted continuamente manifiesta, pero no firmar misivas.
Pensaba que, en esta época de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Cuenca, la figura del concejal de Educación y Cultura se había extinguido después de utilizarla para “librarse” del gerente de la Fundación de Cultura Ciudad de Cuenca y colocar a un amigo.
Sr. Catalá, siendo usted todo un licenciado y yo sólo un diplomado (ni comparación tiene), cómo no voy a acusar carencias en el “arte de la comunicación”, como usted lo denomina… Sin embargo, aunque no descienda de la pata del Cid como algunos, mi poca formación me da para saber que todas las palabras tienen distintos contenidos semánticos y que, con el tiempo, algunas de ellas pueden desaparecer por el desuso y a veces ser utilizadas como metáforas. Creo que el término “cuchipanda” se ajusta a esta definición y con ese sentido lo use en mi alocución.
Respecto a esta iniciativa cultural, yo no juzgo su importancia, me limito a reflejar su idoneidad en estos momentos de crisis económica y su repercusión social, ya que (con todo el respeto para los que han tomado parte en el Festival), parece que han sido más bien pocos.
No sé si es que, como recién llegado, no comparte usted todas las tesis del Partido que actualmente lo acoge, pero el PP, con su alcalde Pulido a la cabeza, se ha desvivido pidiendo a otras administraciones austeridad y control del gasto. Pues bien, ahora les toca ser coherentes y hacer un esfuerzo por optimizar los recursos, también los del Consorcio Ciudad de Cuenca, que gracias a los socialistas va a recibir 1.000.000 de euros más de lo previsto, por más que les duela a ustedes, que es lo que parece que les ocurre después de oír sus continuas críticas.
Una manera de hacerlo es priorizando aquellas inversiones que resulten productivas porque contribuyan a la generación de empleo y riqueza, como es el caso de las obras públicas. Para que usted me entienda: no se trata de que Consorcio no puede financiar actividades culturales como ya ha hecho, sino que, debido al momento económico, hay que priorizar otro tipo de actuaciones y, en el caso de otros eventos, asegurarse de su rentabilidad social para no derrochar el dinero de todos.
Por supuesto que la cultura no debe dejarse de lado ni siquiera en estos momentos de crisis, por eso el Gobierno de España ha contemplado en los PGE 2009 inversiones para la Fundación Antonio Pérez (20.000 €), la Fundación Antonio Saura que usted conoce sobradamente (22.000 €), la Catedral de Cuenca (442.000 €), el Museo de Cuenca (300.000 €) o la Semana de Música Religiosa (100.000 €).
En las observaciones que hace usted sobre mi persona, no voy a entrar. Entiendo que ha querido pasar a engrosar la lista de sus compañeros que no saben diferenciar la crítica política de la personal y recurren a la descalificación. Sólo le diré que soy el mismo que era cuando ejercía todos esos cargos que usted enumera y entonces me pasaba la mano por el hombro siempre que podía. Claro que usted regentaba una galería de arte, formaba parte de la Fundación Saura y pertenecía a otra formación política, Independientes por Cuenca, a la que presuntamente traicionó para cumplir sus legítimas aspiraciones políticas. Entonces nos llevábamos bien, ¿se acuerda Sr. Catalá?, pero mi simpatía por usted va decreciendo a medida que ha convertido en su único objetivo arremeter contra toda lo que huele a socialista. ¡Algo habremos hecho bien…!
Por cierto, imagino que tendrá usted el corazón dividido ahora que su ex partido pide que se realice una consulta popular sobre la Estación del AVE, consulta que Pulido no va a llevar a cabo. ¿Qué posición va a tomar, Sr. Catalá?, ¿va a renunciar a la consulta que usted también persiguió en su día o va a dar la espalda a su alcalde como ya hizo con sus antiguos compañeros de partido? Esas y no los matices de mis declaraciones deberían ser sus preocupaciones.

Luis Carlos Sahuquillo García

No hay comentarios: