jueves, 31 de julio de 2008

Artículo de Opinión

De bombillas y corbatas

El ministro Sebastián no suda ni con corbata. Por eso quiere ahorrar energía: es bueno para España y los españoles. Bono, que se empapa como un encofrador en el tajo, soporta el nudo en el gollete como si le fueran a dar garrote. Pero no se queja y reprende a sus señorías por no cumplir con el protocolo.
El ministro Sebastián va en metro al trabajo, pero, mientras él cumple como buen ciudadano, sus escoltas le siguen en superficie en dos bugas de 12 litros de consumo medio cada uno (24 en ciudad) y 220 gCO2/km, es decir : una ruina energética y una calamidad para el cambio climático. ¿Qué leerá en el metro el Ministro de Industria, Turismo y Comercio?.
El ministro Sebastián sube el butano y se jiña cada vez que el jeque de turno se cabrea. Aunque sea un jeque bolivariano de todo a cien. Y venga a fragatas y helicópteros para el mudo venezolano.
El ministro Sebastián obligará a introducir en las flotas de vehículos públicos un mínimo del 20% de biocarburantes cuando actualmente no suponen ni el 1% del consumo nacional. La flota conquense echa humo como las guaguas cubanas. Allí Fidel no lleva chalina; viste chándal.
El ministro Sebastián quiere poner el A/C a 26 grados, pero regaló Endesa a los italianos y a alguno más que cotiza en Bolsa y en las islas Caimán. Y en invierno, que no pase de 21, eso sí, sin termostato, calderas a tope y ventanas abiertas.
El ministro Sebastián nos va a regalar una bombilla de bajo consumo en 2009 y otra en 2010. Y quiere ahorrar un 50% en la luminaria de autopistas y autovías. Será para los que las tengan. Las autovías, digo.
El ministro Sebastián impulsará una norma que permitirá a las empresas ferroviarias compensar en su factura la electricidad recuperada por frenada. En Cuenca se van a forrar con este sistema: ya veo al Cabrejas Express tirando de bridas en Chillarón para cumplir con el programa energético ministerial.
El ministro Sebastián reducirá los límites de velocidad en un 20% de media en el acceso a las grandes ciudades pero no dice nada del derroche de fuel y mala leche en los atascos.
El ministro Sebastián exhibió en un debate con Gallardón una revista donde salía una amiga del alcalde de Madrid implicada en turbios asuntos - caso Malaya - en la Marbella enladrillada. Juego sucio para, al final, no recoger su acta de concejal y solicitar su reingreso en la Universidad Complutense de Madrid donde es profesor titular de Fundamentos del Análisis Económico.
Reingresó poquito. La tiza no debe ser ecológica.
Antonio Melero Pita

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