CEOE CEPYME valora positivamente los datos del paro en marzo en la provincia a pesar de la desaceleración económica

Teniendo en cuenta la situación económica que está atravesando la sociedad española con la desaceleración económica y la crisis del sector inmobiliario, la Confederación de Empresarios de Cuenca CEOE CEPYME valora los datos registrados sobre el paro en el mes de marzo en la provincia de Cuenca de manera positiva debido a que ha descendido en 260 personas situándose en los 9.013 parados, un 0,97 por ciento menos que en el mes de febrero. (9273 parados en febrero en Cuenca). De esos 9013 parados, 3192 son hombres y 5.821 mujeres.
Por sectores, Agricultura cerró el mes con 471 parados, Industria registró 831, Construcción alcanzó los 1.149, Servicios sumó 5.242 y el sector Sin Empleo Anterior apuntó 887.
Parte de culpa de ese descenso del desempleo en la provincia de Cuenca directamente relacionado con el sector servicios y en especial de la hostelería y turismo que han tenido una importante participación en las vacaciones de Semana Santa.
Según CEOE CEPYME CUENCA, los datos hechos públicos por el Instituto Nacional de Empleo (INEM) desprenden un nuevo incremento en el número de desempleados en Castilla-La Mancha, por tercer mes consecutivo, con 139 personas más que en mes de febrero, es un dato negativo pero no tanto como los 4.381 desempleados más registrados en el mes de febrero, colocando el número total de desempleados en la región en 105.658.
En un contexto de desaceleración de la demanda interna, menor renta disponible y elevada necesidad de financiación de la economía española, desde CEOE CEPYME se considera que la moderación de precios y salarios constituye la variable clave para mantener el empleo y la actividad. Por lo que sería necesario en Castilla-La Mancha una aplicación seria y responsable de la prórroga del Acuerdo Nacional para la Negociación Colectiva (ANC) por parte de todos los agentes implicados que conlleva una moderación salarial y una flexibilización contractual.
En esta situación, no deberán introducirse en el mercado laboral nuevas rigideces de obligar a las Pymes de la región a elaborar nuevos documentos como los planes de igualdad que, sin llegar a beneficiar a las partes implicadas, contribuye a dificultar la actividad empresarial y perjudica el mantenimiento del empleo.