viernes, 30 de noviembre de 2007

Artículo de Opinión

CARTA AL SEÑOR ARRIBAS
Hace mucha gracia leer una y otra vez, como si no tuviera otra cosa que decir el Sr. Mariano Arribas, que los miembros de la Corporación Municipal del Ayuntamiento de Cuenca se han subido el sueldo. Y hace gracia, decimos, porque sea el tema que sea o del que le toque hablar: religión, política o del tiempo…, siempre acaba diciendo lo mismo. ¿No será, Sr. Arribas, que no tiene argumentos para defender una postura concreta y utiliza el mismo discurso una y otra vez?, que si los sueldos de los Concejales, que si el nombramiento del asesor…
Pero si quiere hablamos de sueldos y nombramientos. Empezaremos por usted mismo para no irnos muy lejos. Usted accedió a un puesto de trabajo en la Diputación Provincial de Cuenca a través de un concurso específico o “especial” en el que solo faltaba exigir como requisito que pusieran su foto. Decimos especial para que lo entiendan los ciudadanos y sepan que este tipo de acceso a una plaza se hizo especialmente para una persona determinada, que en este caso era usted y en el que ninguna otra persona tenía posibilidades. Esto hace que gobierne quien gobierne en Diputación, usted, que ante todo es un político, seguirá en su puesto aunque a veces no mereciendo la confianza de quién gobierne en cada momento. A diferencia de usted, el asesor al que siempre se refiere, es personal eventual y, por tanto, cesará automáticamente cuando cese quien le nombró.
El sueldo que usted tiene en esa institución provincial, Sr. Arribas, es de 57.088,50 euros al año, (sin contar lo que cobra como vocal de la Junta Económico Administrativa Local) similar al de un Diputado Provincial y, desde que los Concejales del Ayuntamiento se lo han subido, similar al de un Concejal, con la diferencia de que usted lo está cobrando desde bastante antes.
Pero continuemos. Los Concejales del Ayuntamiento se han subido el sueldo para igualarse a los Diputados Provinciales, repetimos, para igualarlos, porque estos lo cobraban desde mucho antes.
Como usted mismo dice, Sr. Arribas, los ciudadanos posiblemente no conocen este detalle y debe saberse. Y utilizamos una frase suya: “lo que ocurre es que los jefecillos de la izquierda de Cuenca y sus amigos (entre los que le incluimos) están gorrineando tanto el asunto que confunden al personal”.
Entendemos que le moleste que se hable del desastre presupuestario heredado puesto que usted ha contribuido en parte a él por haber sido Concejal responsable de hacienda en la legislatura 1999-2003, así que de momento no incidiremos en ello, pero lo que sí vamos a decir porque todos los ciudadanos deben saber, es que todos los conquenses hemos heredado del anterior Equipo de Gobierno una obligación de pagar a dos “amiguetes” la nada despreciable cantidad de 123.677 euros a cada uno por blindarles unos contratos para la prestación de servicios de confianza del Equipo de Gobierno, ¿o es qué esto lo van a pagar ustedes los del PSOE?. Eso es lo que deberían hacer. Si a estas cantidades sumamos los tres meses de salario que ha habido que pagarles, el resultado que obtenemos es de más de 46 millones de las antiguas pesetas que habrá que pagar a dos personas contratadas por el anterior Equipo de Gobierno en puestos de confianza.
Con estos antecedentes, sinceramente Sr. Arribas, no entendemos por qué ataca continuamente al asesor, que recordamos que tiene un puesto eventual, no cobra como usted y no tiene un contrato blindado.
Partido Popular de Cuenca

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es un artículo muy esclarecedor sobre lo que ha sido y es este “Señor”, un oportunista de la política que llego por casualidad y se está aprovechando de ella para “medrar”. Ahora que es funcionario, con los meritos que está haciendo quizás le den una plaza para candidato al Senado en la próxima legislatura. Sólo falta por decir los regalos en especie que con el dinero de todos los conquenses le hizo, siendo Presidente de la Diputación al Señor del “Señorío del Pinar”, (Mateo Sauquillo) es decir, pozo de aguas, red de abastecimiento, consumo de energía…etc.

Por suerte en Cuenca nos conocemos todos y la dignidad hay que ganársela día a día.