martes, 25 de septiembre de 2007

Se suprimen los impuestos de sucesiones y donaciones para aliviar la carga fiscal de las familias

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunció que el Consejo de Gobierno ha aprobado un anteproyecto de ley para suprimir los impuestos de sucesiones y donaciones que se producen en el ámbito familiar, con el objetivo de aliviar la carga fiscal de las familias de las Comunidad Autónoma.Esta medida que, tal y como explicó el presidente Barreda, entrará en vigor el próximo uno de enero, va a beneficiar a unos 60.000 declarantes de Castilla-La Mancha que se van a ahorrar una cifra cercana a los 50 millones de euros. De esta manera, el 80 por ciento de los contribuyentes de estos impuestos gozarán en Castilla-La Mancha de nuevas ventajas fiscales que propiciarán un mayor crecimiento económico al facilitarse la transmisión de las empresas familiares.En concreto, apuntó Barreda, la exención del impuesto de sucesiones supondrá un ahorro superior a los 40 millones de euros para unos 50.000 declarantes, mientras que de las exenciones en el impuesto de donaciones se beneficiarán unos 10.000 declarantes, que ahorrarán más de nueve millones de euros.Asimismo, José María Barreda detalló que con la aplicación de estas nuevas medidas los impuestos de sucesiones y donaciones entre cónyuges y de padres a hijos se reducirán en un 95%, quedando en vigor una fracción marginal con el único propósito de servir al control y seguimiento a la Administración regional. Asimismo, cuando los destinatarios de una herencia o transmisión de bienes sean personas con discapacidad se beneficiarán de una deducción adicional, ya que estos impuestos se reducirán en un 99,75%.El presidente regional aseveró que estas medidas, además de beneficiar a las familias castellano-manchegas, supondrán el alivio añadido de facilitar un trámite que, por norma, llega en momentos difíciles para las personas.José María Barreda argumentó que, con la adopción de estas medidas fiscales, el Gobierno que preside facilitará las transmisiones de bienes y derechos para conseguir una mayor eficiencia económica y ventajas para la empresa familiar, reducir las diferencias de tributación que se derivan de la naturaleza de los bienes transmitidos y favorecer la transparencia en las transmisiones de bienes y derechos que se producen dentro de la familia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hombre, José María, me alegro muchísimo de que te hayas dado cuenta de lo buena que era esta propuesta del PP y que tanto criticaste en la pasada campaña electoral.

Cómo estarán las cosas, José María, que has congelado la implantación de la Educación de la Ciudadanía (única autonomía socialista en hacerlo) y ahora copias (de lo que me alegro, te repito) lo que hizo Esperanza Aguirre en Madrid y quería el PP hacer en Castilla-La Mancha.