Aproximadamente una veintena de localidades de la provincia se encuentran en estos momentos en trámites para revisar su planeamiento urbanísticos

El delegado provincial de Ordenación del Territorio y Vivienda, Rodrigo Molina, destacó el importante esfuerzo económico que realiza el Gobierno de Castilla-La Mancha para que todos los municipios de nuestra región cuenten con un plan de ordenación municipal, ya que su departamento subvenciona el 90 por ciento del coste de redacción de estos planes.
Se trata de una medida que redunda “en un desarrollo más ordenado de los núcleos de población”, indicó Molina. En este sentido, puso como ejemplo la localidad de Casas de Benítez, actualmente inmersa en la realización de un nuevo plan que se ajuste a las necesidades de esta localidad de poco más de 1.000 habitantes.
Y es que, según el delegado provincial, desde el Gobierno regional “hay una especial sensibilidad con los núcleos de población más pequeños”, puesto que son los que tienen mayor dificultad para asumir con sus presupuestos cualquier tipo de actuación.
De hecho, aproximadamente una veintena de localidades de la provincia de Cuenca se encuentran en estos momentos en trámites para revisar su planeamiento urbanístico.
A través de estas figuras de planeamiento se pretende dar “una respuesta ordenada” a la etapa de crecimiento que está experimentando el conjunto de nuestra comunidad autónoma y que implica la mejora de las dotaciones, equipamientos y servicios de nuestros pueblos.
El delegado provincial de Ordenación del Territorio, que visitó la localidad de Casas de Benítez, se interesó por el estado en el que se encuentra la redacción de su plan de ordenación municipal y expuso al primer edil, Alfonso Plaza, los mecanismos de colaboración existentes con los que cuenta el ejecutivo autonómico.
Igualmente, resaltó el cambio que experimentará este municipio situado en la comarca de la Manchuela, cuando se finalicen infraestructuras como el Eje de la Manchuela o la autovía Cuenca-Albacete.

Mejoras urbanas
El delegado de Ordenación del Territorio y Urbanismo aprovechó su estancia en esta localidad para visitar las mejoras urbanas que, gracias a la colaboración económica del Ejecutivo castellano-manchego, se han ejecutado en la zona de acceso al cementerio municipal.
Los trabajos se han centrado en la mejora de la distribución de aguas y del saneamiento con tuberías de PVC y de hormigón, asícomo la instalación de bocas de riego. Del mismo modo, se ha instalado alumbrado público, se ha pavimentado con aglomerado asfáltico la zona y se ha dotado de mobiliario urbano.
Actuaciones que, a pesar de no suponer inversiones cuantiosas, cumplen una importante función social al rehabilitar zonas degradadas para uso y disfrute de todos los vecinos.