La Escuela de Magisterio de Cuenca ha acogido la celebración del ciclo ‘Cine y Escuela’ con el fin de ilustrar los problemas y cuestiones que plantea la enseñanza en el aula a través de tres películas que parten de presupuestos conceptuales y estéticas divergentes como La versión Browning, Los cuatrocientos golpes y Los chicos del coro
La Escuela de Magisterio de Cuenca ha acogido la celebración del ciclo ‘Cine y Escuela’ con amplia participación de alumnos y profesorado.El ciclo se ha planteado como un curso de libre configuración, pero principalmente como una actividad abierta a la participación de toda la comunidad universitaria con el fin de ilustrar los problemas y cuestiones que plantea la enseñanza en el aula a través de tres películas que parten de presupuestos conceptuales y estéticas divergentes.En primer lugar se ha proyectado La versión Bowning de Mike Figgis, centrada en la figura del profesor que en su último día de docencia en el centro se replantea toda su labor pedagógica. Le ha seguido la obra maestra de François Truffaut, Los cuatrocientos golpes, que refleja los problemas de un niño para adaptarse al mundo escolar y al universo en general hostil de los adultos que le rodean. Por último, se ha expuesto Los chicos del coro, de Cristophe Barratier, muestra el poder de la música, junto con el espíritu de comprensión mutua y apertura mental, en la labor docente. Tras la proyección de cada una de estas películas, tuvo lugar un debate entre profesores y alumnos para interpretar las claves pedagógicas, pero también estéticas, de las obras vistas.Esta primera edición del ciclo se ha centrado en la escuela vista desde el cine, pero, más allá de ello, el arte cinematográfico constituye un apoyo instrumental de primer orden para diversas disciplinas curriculares. En consecuencia, y animados por el éxito de la convocatoria, los profesores responsables del ciclo, Ángel L. Luján y Mariano Herraiz, plantean ampliar los temas, contenidos y formato en sucesivas ediciones y consolidar así un gran foro de discusión y disfrute sobre la relación entre educación y cine.
La Escuela de Magisterio de Cuenca ha acogido la celebración del ciclo ‘Cine y Escuela’ con amplia participación de alumnos y profesorado.El ciclo se ha planteado como un curso de libre configuración, pero principalmente como una actividad abierta a la participación de toda la comunidad universitaria con el fin de ilustrar los problemas y cuestiones que plantea la enseñanza en el aula a través de tres películas que parten de presupuestos conceptuales y estéticas divergentes.En primer lugar se ha proyectado La versión Bowning de Mike Figgis, centrada en la figura del profesor que en su último día de docencia en el centro se replantea toda su labor pedagógica. Le ha seguido la obra maestra de François Truffaut, Los cuatrocientos golpes, que refleja los problemas de un niño para adaptarse al mundo escolar y al universo en general hostil de los adultos que le rodean. Por último, se ha expuesto Los chicos del coro, de Cristophe Barratier, muestra el poder de la música, junto con el espíritu de comprensión mutua y apertura mental, en la labor docente. Tras la proyección de cada una de estas películas, tuvo lugar un debate entre profesores y alumnos para interpretar las claves pedagógicas, pero también estéticas, de las obras vistas.Esta primera edición del ciclo se ha centrado en la escuela vista desde el cine, pero, más allá de ello, el arte cinematográfico constituye un apoyo instrumental de primer orden para diversas disciplinas curriculares. En consecuencia, y animados por el éxito de la convocatoria, los profesores responsables del ciclo, Ángel L. Luján y Mariano Herraiz, plantean ampliar los temas, contenidos y formato en sucesivas ediciones y consolidar así un gran foro de discusión y disfrute sobre la relación entre educación y cine.
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