jueves, 14 de febrero de 2008

El palacio de Don Juan Manuel, en Belmonte, albergará la primera venta turística de la Ruta del Quijote

El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha autorizado, a propuesta de la Consejería de Cultura, el convenio que este departamento suscribirá con la Empresa Pública “Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha, S.A.” para la construcción de la Venta de la Ruta de Don Quijote denominada “Venta del Infante don Juan Manuel”, en la localidad conquense de Belmonte.
Esta infraestructura, que será la primera Venta turística de la Ruta del Quijote, se levantará en el antiguo Palacio del Infante Don Juan Manuel y contará con más de 3600 metros cuadrados de superficie. Formará parte del denominado tramo 1 de la ruta, que discurre entre Toledo y San Clemente, pasando por El Toboso y Belmonte.
El aspecto principal de la intervención en Belmonte es la restauración y rehabilitación de un monumento de gran valor patrimonial que se encuentra abandonado desde hace muchos años.
El esquema de organización de la Venta se articula en torno a un eje principal relacionando el atrio ajardinado y zaguán de acceso con el corral trasero, jardín castellano, con alberca y trazas geométricas.
El proyecto se desarrolla a partir del recorrido de los "caminantes" que permite disfrutar de la visión de los diversos ambientes recientemente restaurados, apoyado con un tratamiento arqueológico y paisajístico que subraya su carácter sin restarle protagonismo y que por el contrario, realza la secuencia de perspectivas que son el principal atractivo de este Alcázar.
Este recorrido peatonal se realiza a través de dos niveles, el primero atravesando restos arqueológicos, va descubriendo el antiguo esplendor. El segundo, con un carácter más paisajístico permite una visión del exterior del palacio enmarcado en el conjunto del pueblo, y dominando las espléndidas vistas al castillo y las más próximas a la colegiata.
La antigua iglesia, totalmente en ruinas, se rehabilita como espacio cultural permitiendo actuaciones al aire libre, en el atrio o en el interior, de teatro, cine y literatura, conformando un espacio de uso polivalente, permitiendo el descanso y la conversación sosegada, también alrededor del hogar, gran chimenea castellana, en el final del local.
La zona de restaurante y cafetería se organiza en torno al palio sur, rehabilitando el edificio restaurado por la escuela - taller. Permitiendo también su uso como comedor al aire libre.
Las habitaciones se desarrollarán en torno al claustro, permitiendo un espacio tranquilo que permitirá al caminante de la Ruta el descanso reparador, resultando en total 30 habitaciones dobles, 2 familiares tipo suites y 2 para minusválidos.
El edificio más antiguo de la villa
Fundado por el Infante de Castilla, D. Juan Manuel, al obtener el Señorío de Belmonte, posiblemente este Alcázar sea el edificio más antiguo de la villa del que partían dos murallas de piedra de yeso que circundaban el pueblo.
Más tarde pasó a posesión de D. Juan Pacheco, primer marqués de Villena que construyó el actual castillo en 1456, dejando el Alcázar para convento de religiosas. Tras su llegada se realizaron diversas obras de adaptación y ampliación, destacando su magnífico claustro atribuido al arquitecto Esteban Jamete, que actualmente está en parte consolidado por la buena labor de la escuela- taller municipal.
En 1960, las monjas abandonan el convento para trasladarse a su casa de Olmedo, entre otras causas por el incipiente estado de ruina del edificio y el imparable deterioro del mismo que ha ocasionado el paso del tiempo y el robo de elementos constructivos.
El Palacio fue adquirido en 1972 por el Estado mediante donación del Ayuntamiento de Belmonte con la finalidad de construir un Parador Nacional de Turismo. Al no culminarse tal finalidad es ahora el Gobierno de Castilla-La Mancha quien retoma la idea inicial para construir la primera Venta de la Ruta de Don Quijote.

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