
El simulacro se inició a las 10,30 horas y se prolongó hasta las 18 horas. El grupo de rescate estaba compuesto por cuarenta personas pertenecientes a los diferentes Cuerpos de Bomberos de Castilla-La Mancha y médicos espeleólogos. Además participaron bomberos de Cuenca especializados en rescate vertical.
El objetivo de este simulacro era tener un entrenamiento y coordinación en caso de rescates de personas que practican el deporte de la espeleología en cavidades. Además también la finalidad de este ejercicio era la de estrechar la relación de trabajo con otros cuerpos de rescate para la posible cooperación en rescates en otros puntos de la comunidad castellano-manchega.
Estos entrenamientos sirven además para las maniobras dentro del Cuerpo de Bomberos y como entrenamiento para rescates en fachadas de viviendas, extracción de accidentados en colectores, silos…etc.
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