Con ocasión de la presentación del Informe científico de las Naciones Unidas sobre cambio climático por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC), durante la semana del 12 al 17 de noviembre en Valencia, numerosas organizaciones ecologistas, sindicales, sociales y ciudadanas del Estado español convocan un apagón con el lema:“Frente al cambio climático: actúa ya”
APAGÓN: el día 15 de noviembre de 2007 entre las 20:00 y las 20:05 horas de la tarde
La convocatoria es abierta y consiste en la desconexión del consumo eléctrico en viviendas, centros de trabajo públicos y privados e instalaciones y equipamientos públicos durante ese periodo.
Ecologistas en Acción Cuenca invita a sumarse a ella a cuantas personas y entidades deseen llamar la atención de la sociedad y de las instituciones sobre la necesidad de tomar medidas urgentes ante esta grave amenaza.
Se trata de sensibilizar a las personas, instituciones y empresas contra un fenómeno que ya está en marcha. De forma rápida, en corto tiempo, como nunca ha sucedido en la historia de la Tierra, aumenta la temperatura a medida que aumentan los gases contaminantes. Tenemos que actuar contra el cambio climático desde la ciudadanía, desde las diferentes administraciones y desde los poderes económicos. Los efectos del cambio climático empeoraran nuestra economía, nuestra salud y nuestra calidad de vida. En los países pobres los efectos serán devastadores.
3 comentarios:
Apagón eléctrico para hacer compañía al apagón intelectual de los susodichos.
Todo sea por llenar la chequera del gran líder Al, cuya casa, que tendrá la luz encendida, gasta en electricidad en un mes lo que cualquiera de nosotros en dos años.
Ese Al (Gore) tiene poca verguenza.
Pero yo por mi parte, haré lo que me corresponde. Yo sí les quiero dejar un mundo mejor a mis hijos.
¿Y no te da qué pensar que si el propio profeta de este credo, que se está embolsando los millones a miles, no se cree lo que dice, será por algo?.
Ojalá nuestros hijos disfruten de un mundo mejor que el nuestro (es lo que desearía cualquier padre o madre), pero el clima que les toque (si van a usar más el paraguas o si van a usar menos los abrigos) no depende de nosotros.
Pero es muy reconfortante para nuestro egocentrismo el creer que, apagando la luz de nuestra casa, podemos tener efecto sobre el clima.
El clima ha cambiado siempre, y seguirá cambiando. Ha habido más CO2 en la atmósfera que ahora desde tiempos inmemoriales (incluso en los años 30 lo había), y no hay correlación entre la temperatura de la tierra y la concentración de CO2 en la atmósfera.
Sé que, si nos damos cuenta del percal del enorme engaño que todavía intentan vendernos (la expresión "calentamiento global" les da ya vergüenza usarla a ellos mismos) algunos se quedarán sin subvenciones, otros sin conferencias millonarias y otros sin ideas para el programa electoral, pero la realidad es muy tozuda.
Todavía recuerdo cuándo, hace treinta años, nos intentaban vender la moto de que para el año 2000 el planeta estaría helado. Esa campaña supuso un enorme incremento en el dinero que recibieron los grupos ecologistas de los gobiernos occidentales (o sea, de nuestros impuestos).
Resumiendo: Algunos ya han comprobado que la mejor manera de llenar la saca es anunciar catástrofes.
Yo, por mi parte, acabo de soltar un sonoro cuesco y no lo lamento, a pesar de que probablemente mi pedorreta esté impidiendo la lluvia en el estrecho entre Java y Sumatra (el efecto mariposa, ya se sabe), y provoque con ello una nueva erupción volcánica.
Y, espero que, por encender la luz en mi casa esta noche (o cuando me de la gana) no se sequen cien hectáreas de bosques al lado del río Yukón, y la palmen los pobres salmones, que tan ocupados están en remontarlo para reproducirse.
Como decía un personaje de la película "Jerry Maguire":
"¡Enséñame la pasta"!
Publicar un comentario