Desarrollo del protocolo de colaboración suscrito entre Castilla-La Mancha y el Ministerio de Fomento

El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, ha subrayado la importancia para Castilla-La Mancha de los cambios de titularidad de carreteras aprobados hoy en el Consejo de Ministros, “porque suponen un impulso esencial para la construcción de unas infraestructuras que contribuirán en gran medida a la vertebración regional, a la conexión con la red nacional de vías de alta capacidad y a agilizar el tráfico con la construcción de variantes de población”Sánchez Pingarrón hacía referencia a que el Consejo de Ministros ha aprobado hoy que la Autovía de La Alcarria se integre en la red de carreteras del Estado, y sea de titularidad nacional, y que la carretera N-320 entre La Gineta (Albacete) y Cuenca sea transferida a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y así pueda construirse la autovía que unirá Cuenca y Albacete. Además, también ha aprobado la cesión a la Comunidad Autónoma del tramo entre Daimiel (Ciudad Real) y Mota del Cuervo (Cuenca) de la N-420 y del tramo entre Manzaneruela (Cuenca) y el límite provincial de Cuenca con Valencia de la N-330.El consejero de Ordenación del Territorio y Vivienda ha incidido en la “estrecha colaboración entre los gobiernos nacional y regional que está permitiendo la coordinación de actuaciones y un diseño de infraestructuras basado en la complementariedad de proyectos y en la búsqueda de la cohesión tanto dentro de la Comunidad Autónoma como en el ámbito nacional”.Otro aspecto destacado por Sánchez Pingarrón es que la decisión sobre la Autovía de La Alcarria “es el primer caso que se produce en España en que una nueva autovía de interés regional y diseñada por una comunidad autónoma pasa a integrase en la Red de Carreteras del Estado”.El Consejero de Ordenación y Vivienda, Julián Sánchez Pingarrón, y la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, firmaron el 27 de septiembre un acuerdo para el cambio de titularidad de estos proyectos.Estas actuaciones están incluidas en el protocolo de colaboración suscrito por el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y la titular de Fomento el 24 de octubre de 2005. Las inversiones previstas en vías de alta capacidad ascienden a 7.119 millones de euros por parte del Estado y 2.850 millones de la Consejería de Ordenación del Territorio y Vivienda. La Autovía de La Alcarria es una iniciativa promovida inicialmente por el Gobierno regional, pero el Ministerio de Fomento consideró que reunía las condiciones necesarias para formar parte de la Red de Carreteras del Estado al servir para enlazar la autovía A-3 en Tarancón con la autovía A-2 en Guadalajara.Una vez aprobado este cambio de titularidad, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha entregará el proyecto constructivo de los cuatro tramos en que se divide la autovía, así como el expediente completo que incluye la Declaración de Impacto Ambiental y la aprobación definitiva, para que sea el Estado quien financie y dirija la ejecución del proyecto.La longitud de la autovía de La Alcarria es de 111,23 kilómetros y el coste final de la inversión se estima en 630 millones de euros.En cuanto a la carretera nacional N-320, a partir del Real Decreto aprobado hoy por el Consejo de Ministros, el Gobierno regional podrá impulsar la autovía entre Cuenca y Albacete, que tendrá una longitud de unos 120 kilómetros y un coste de construcción estimado en 500 millones de euros.