NUEVA CONCENTRACIÓN CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO.

De nuevo las islas afortunadas son testigo de otro asesinato de una mujer a manos de su pareja o expareja. Esta vez ha sido en un pueblo de Tenerife. Además ha habido varios intentos en distintos lugares del país. Casi 40 mujeres en lo que va de año han sido víctimas de este constante terrorismo doméstico.
Es comprensible el fatalismo de la mujer agredida, que no se ve con fuerzas para contrarrestar la agresión y que no sabe cómo salir de la situación. Pero no es aceptable reproducir en el ámbito de la sociedad la resignación ante un tipo de delitos contra los que se pueden tomar muchas medidas, si hay voluntad política de hacerlo. Por esto estamos aquí, porque no nos resignamos, porque aunque sea reciente el tratamiento público de estos crímenes, su registro estadístico y las denuncias tipificadas por el Código Penal, es una realidad tan grave que no nos puede dejar impasibles, inmóviles, sumisos ante políticas ineficaces. No, no queremos tolerar más muertes de mujeres, no nos resignamos ante este frecuente y macabro fenómeno que recorre toda la geografía española.
La educación en la Igualdad y la Resolución Pacífica de los Conflictos son medidas necesarias que se han de adquirir sin demora, aunque sea de un modo lento su incorporación al tratarse de asuntos culturales nada arraigados en nuestro actual contexto machista. Pero hace falta más, elementos fundamentales como medidas legales, personal preparado en los ámbitos judiciales, educativos, policiales, sanitarios y de servicios sociales. En las modificaciones educativas que se están llevan a cabo constantemente debe reflejarse este problema y atenderse como materia importante para que cuando un titulado universitario de los campos antes mencionados se disponga a trabajar haya estudiado en su currículo la actualidad y cómo debe atajarla. La violencia de género ha de estar presente como parte de las prácticas de ciertas carreras universitarias, en medicina, en derecho, trabajo social, academia de policías, psicopedagogía, enfermería, etc.
Desde todos órdenes institucionales se ha de abordar definitivamente, sin falsas voluntades, sin ahorros económicos y sin escatimar esfuerzos. Hace falta ya que se tome en serio y con rigor este problema estructural. Nosotros ya lo estamos denunciando.