martes, 8 de agosto de 2006

Opinión


CONTRA EL OLVIDO Y POR LA DIGNIDAD. Carta abierta al Sr. López Moraga, del PP-Casasimarro.

He dudado desde el momento en que me enteré y luego leí su respuesta a unas declaraciones que “dediqué”(sic) a los concejales del PP de Casasimarro, pero me he decidido a hacer pública una pequeña reflexión sobre lo que usted dice y lo que defiende en su moción sobre las “víctimas de las hordas rojas”. Primero por que me apetece “enfrentarme” a usted, dialécticamente y a través de la prensa y si fuera menester en un debate público, por que al contrario que durante cuarenta años ahora no parece que existan riesgos de manifestar mi opinión y por que el tema se lo merece.
Nadie va a negar que hubo ejecuciones extrajudiciales en los primeros meses tras el golpe de Estado de 1936, en su pueblo o en otras localidades de la provincia. Pero creo que esas víctimas fueron enterradas dignamente, se les realizaron homenajes y todavía aún nuestros cementerios e iglesias católicas están llenas de monumentos funerarios en recuerdo de esos “martires” “caidos por Dios y por España”.
Da usted un salto desde su “alzamiento nacional”, hasta el presente, para criticar a IU, al PSOE y a los republicanos de “remover el pasado”. Que fácil es olvidarse de cuarenta años de dictadura cruenta y de abuso del poder. Han sido muchos años asfixiando la memoria o corrompiéndola, de franquismo sociológico, de claudicación, y que tuvo su continuación en la “modélica transición”.
Comparto lo que decía un viejo luchador que estuvo preso 23 años por la sencilla razón de ser comunista y buscar un mundo mejor para él y sus semejantes: “Los falsificadores del pasado quieren establecer un juicio salomónico sobre la historia de España, pero no es igual luchar contra la libertad que defenderla. Esa guerra no la queriamos, no la necesitábamos, habiamos ganado las elecciones unos meses antes. Quisieron cerrar a sangre y fuego ese proceso democrático”.
Como republicano y heredero de las ideas que sustentaron la IIª República, suscribo las palabras de Rosa Regás: “fue el primer y tal vez el único intento hasta entonces de procurar al pueblo español la dignidad, la libertad y los derechos fundamentales, y sacarlo de la sumisión y el oscurantismo en los que había vivido durante toda su Historia”.
Por último decirle que cuando cursé la carrera de Historia aprendí de mis maestros que el rigor debería protagonizar nuestro trabajo, y he aprendido en la experiencia vital y política que la Dignidad y la Memoria son señas de identidad esenciales. Por eso, aviso que estaré siempre junto a los olvidados, frente a los olvidadores y los olvidadizos.


Angel Luis Castellano Bobillo
Coordinador provincial de IU-Cuenca

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Disculpen, señores de la izquierda, pero esas elecciones en el 36 la ganó la derecha (mejor dicho, las derechas). Ustedes no lo aceptaron y montaron el numerito para que les dejaran hacerse con el poder aun habiendo perdido las elecciones.

El resto ya lo sabemos: Quema de iglesias y colegios, asesinatos de políticos de otros partidos a manos de guardias de asalto. En fin, que nos salvamos por los pelos de que España fuese una pequeña unión soviética.

Anónimo dijo...

Disculpe señor anonimo. Sabe usted poco de historia, creo que es el momento de que se ponga a estudiar y piense, sobre todo piense, si adquiere cultura estudiando.
El númerito, como usted dice, lo montaron ustedes, y lo incluyo, dando un golpe de estado. Porque nosotros, y me incluyo, somos tan democráticos y respetuosos, que hasta no nos importa que gane la derecha. Y Ustedes, con mayuscula, fueron los que estuvieron asesinando gente durante al menos cuarenta años. Y digo al menos, porque también nos hicieron tragar una transición tan cocacola zero que todavía se nos sigue castigando. Y fueron ustedes, señor mío, los que siguieron MATANDO, y siguen, hasta con el pensamiento
Yo soy señora anónima