UN AÑO DE REAL PATRONATO DE LA CIUDAD DE CUENCA

La constitución del Real Patronato Ciudad de Cuenca fue un motivo de orgullopara Cuenca y los conquenses. Todos hemos estado unidos en este empeñocolectivo. En ese momento, y bajo la presidencia de su Majestad el Rey, quedaroncomprometidas con la preservación del patrimonio cultural de Cuenca todaslas Administraciones Publicas.Por ello ha resultado especialmente incomprensible para Independientes porCuenca la mezquina actitud de excluir a nuestro Concejal Antonio Melero delConsejo Rector del Real Patronato.El Real Patronato no debe ser ciertamente mérito del que se apropie ningunafuerza política, porque es la respuesta obligada, no solo en Cuenca, a lanecesidad de conservación de conjuntos patrimoniales de la máxima relevanciahistórica y cultural.En este aniversario, Independientes por Cuenca tiene que hacer unavaloración obligatoriamente negativa de la gestión realizada por elAyuntamiento de los presupuestos asignados al Real Patronato.Si ya se había demorado excesivamente la constitución y entrada enfuncionamiento de un Consorcio que va a empezar a invertir en Cuenca cuandoToledo lleva muchos años recibiendo importantes cantidades de dinero, laineficacia gestora de nuestro Ayuntamiento ha provocado que el año 2005quedará “en blanco” en términos de inversiones para Cuenca, poniendo enriesgo la incorporación de los presupuestos asignados en 2005 a ejerciciosfuturos.Nuestro Ayuntamiento ha sido incapaz de aprobar el presupuesto del RealPatronato para el año 2005 por lo cual, y conforme a las previsiones de laLey de Haciendas locales y del propio régimen financiero del Consorcio, laincorporación de remanentes de crédito al ejercicio de 2006 no estécnicamente viable, porque no hay un presupuesto aprobado para 2005 desdeel que realizar esa incorporación.La Junta de Comunidades o el Estado podrán aumentar su asignación al RealPatronato en sus presupuestos del año 2006, pero el dinero que tuvierandisponible en los de 2005 ya se ha perdido.En cuestión de control de legalidad en el gasto público, también se haconvertido la excepción en norma, y los gastos del Consorcio, en lugar de alrégimen común de fiscalización previa, quedan sometidos al excepcionalsistema de informes realizados con posterioridad al compromiso firme de losgastos. Debemos también denunciar la ingeniería financiera que se está haciendo conlas distintas partidas presupuestarias asignadas al Consorcio del RealPatronato.Analicemos el presupuesto aprobado para 2006:Para empezar, no todo el presupuesto del Real Patronato queda adscrito ainversiones, como sería lo deseable. De los algo más de 8 millones de euros,1.600.000 se destinan a gastos corrientes, no a inversiones.Tampoco es todo el presupuesto financiación adicional para la ciudad deCuenca. Los ingresos previstos en 2006 se sitúan en los 8.200.000 euros, delos cuales 1.200.000 salen del presupuesto del Ayuntamiento, y 600.000 eurosproceden de la Diputación. Cuenca recibe para conservar su patrimonio, quees de la humanidad, algo más de 6 millones de euros.También es cuestionable el destino de los fondos cuando estos no se empleanen inversiones para la conservación del patrimonio natural yarquitectónico.Del plan cuatrienal de inversiones del Real Patronato, se han destinado casi2 millones de euros para renovar el contenido del Museo de las Ciencias,inversión que evidentemente debería ser financiada por la Junta deComunidades como Administración responsable del Museo. Es “contabilidad creativa” que la Junta transfiera presupuesto alAyuntamiento, bajo el epígrafe de financiación adicional con destino al RealPatronato, y que parte de esos fondos se utilicen para financiarcompetencias que son de la propia Administración regional.Tampoco es de recibo recoger varias partidas de inversión ordinaria de lasdistintas Administraciones, como la destinada a comprar autobuses, yagruparla con la etiqueta de inversión supuestamente “extraordinaria” bajoel título del Real Patronato.En resumen, no toda la financiación que se anuncia con reiteración esrealmente inversión “neta” para Cuenca, son injustificables las dilacionesen la utilización de los presupuestos asignados y en algunos casos deproduce un destino inadecuado para los fondos recibidos.IxC