martes, 7 de marzo de 2006

Las últimas lluvias alivian el Júcar, pero la cuenca sigue en estado de emergencia

Las lluvias de las últimas semanas han aliviado la situación del Júcar, porque han evitado tener que desembalsar agua de los pantanos al haber caído en la costa, aunque el río sigue en una situación «claramente de emergencia» porque los niveles de desembalses son muy bajos, afirmó en Cuenca el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Juan José Moragues.Moragues, -que asistió a la presentación de dos actuaciones de emergencia para garantizar el suministro en Cuenca-, dijo que «se ha aprovechado mucho el agua de la costa con recirculaciones y rebombeos, para intentar mantener la parte alta del río con el mayor nivel de agua posible y garantizar así el suministro a las poblaciones».Pero lo que es más preocupante, según Moragues, es que «las aportaciones de los caudales fluyentes superficiales también son los más bajos históricos desde que se toman medidas, es decir, nunca ha habido tan poca agua circulando por el río Júcar y sus afluentes como este año».Esto está dando lugar a que los niveles de los acuíferos bajen, «porque el río no los recarga como habitualmente los estaba recargando y de ahí las actuaciones de emergencia, para intentar tener diferentes acuíferos para el suministro de agua», apuntó.
LA VERDAD

No hay comentarios: