El PSOE considera que la condena por vulnerar derechos fundamentales “prueba el sectarismo del PP”

El Grupo Municipal Socialista ha asegurado que la sentencia del Juzgado de lo Social de Cuenca que obliga al Ayuntamiento a readmitir a una trabajadora al considerar que fue despedida por razones ideológicas “es una prueba más del sectarismo político del Partido Popular”.
La viceportavoz socialista, Inmaculada Cruz, vio “muy grave” que la Justicia considere probado que el Ayuntamiento de Cuenca vulneró los derechos fundamentales a la igualdad y a la libertad ideológica de una trabajadora municipal, que fue despedida “sin más justificación que su parentesco con un ex cargo público socialista”.
Por otra parte, aseveró que, con esa actitud, “el Partido Popular demuestra que no gobierna para todos, sino únicamente para los que comparten su ideología”; y lamentó que, “fruto de esta prepotencia política, se tenga que pagar con dinero de todos los conquenses los más de 24.000 euros de indemnización y salario fijados por el juez”.
Cruz, lamentó que el equipo de Gobierno antepusiera sus “intereses partidistas” al bienestar de los ciudadanos de Cuenca, al descolgarse del programa “Red de Ciudades y Pueblos Sostenibles”, que financiaba la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y que gestionaba la técnico despedida.
En este sentido, recordó que la propia sentencia confirma que el Ayuntamiento renunció a un programa que mejoraba la calidad de vida de los conquenses y para que el que ya contaba con financiación en 2008, “con tal de dar continuidad a su caza de brujas y poder prescindir de un socialista más en su plantilla”.
“La sentencia declara hecho probado que la Consejería de Medio Ambiente comunicó al Ayuntamiento, con fecha 5 de diciembre de 2007, que en el presupuesto de la Comunidad Autónoma para 2008 había una partida para seguir financiando el convenio “Ciudades y pueblos sostenibles”. Sin embargo, la trabajadora fue despedida mediante un carta fechada el 11 de diciembre, seis días más tarde”, declaró.
Igualmente, insistió en que el Ayuntamiento de Cuenca “no pudo justificar en el juicio los motivos del despido de la trabajadora ni siquiera mínimamente”, como se refleja en la sentencia.
Por otra parte, recordó que el equipo de Gobierno ha convocado, con posterioridad al despido de la demandante, dos plazas de inspector de Medio Ambiente, con unas funciones laborales similares a las que venía desarrollando la trabajadora despedida, y con cargo a los propios presupuestos municipales”.
La viceportavoz socialista afirmó que la sentencia “es un varapalo contra la política municipal de Medio Ambiente y Personal, que en apenas doce meses ya ha sido objeto de dos sentencias negativas y tiene pendientes de resolución judicial otras tres”.
Finalmente, manifestó que ésta “no es la única manifestación de la actitud sectaria del equipo de Gobierno”, ya que se ha aprobado el Reglamento del Consejo de Integración, donde “asociaciones de discapacitados han sido discriminadas por razón ideológica”.
En este sentido, recordó que el concejal de Servicios Sociales, Carlos Navarro, declaró públicamente que no permitiría que “particulares o colectivos vinculados al Partido Socialista estuvieran presentes en este Consejo”.