jueves, 22 de febrero de 2007

IxC critica la nula inversión de la JCCM en Cuenca en la promoción industrial de la ciudad

Parece como si en Cuenca definitivamente hayamos renunciado al desarrollo industrial. Es como si existiera un diagnóstico, que hubiera determinado ya una enfermedad genética, que nos incapacita para emprender el camino que se sigue en otros lugares cercanos en el mapa, hacia la industrialización como la principal fuente de empleo.
Casi estamos convencidos de que en Cuenca eso es imposible, y lo achacamos unas veces a la orografía -como si no hubiera ciudades industriales en las alturas-, otras a la falta de verdaderos emprendedores y, últimamente, a que ya es tarde para eso. Pero eso no es cierto.
Ejemplos como el que nos ocupa esta noticia, Hellín-, los encontramos en lugares de la geografía castellano-manchega y en general española. Una apuesta decidida por parte de los gobernantes en este sentido; dotando a las poblaciones de la infraestructura adecuada, una política de verdaderos incentivos para la implantación de empresas, y la facilidad sobre el suelo necesario y al precio adecuado, son las bases para que los empresarios encuentren el atractivo suficiente para la viabilidad económica de sus negocios. Pero eso no sucede en Cuenca.
En Cuenca, hace no muchos meses, el Vicepresidente Lamata anunciaba con orgullo la creación de 7 puestos de trabajo por una empresa de servicios funerarios.
Toledo, Ciudad Real, Albacete y Guadalajara juegan en primera.
Daimiel, Tomelloso, Alcazar de San Juan, Talavera de la Reina, Villarrobledo, Almansa, Hellín ... juegan en segunda.
Cuenca juega en tercera regional, y con el árbitro en contra.

IxC

No hay comentarios: