De Cospedal apoyará que C-LM pueda decidir en órganos del agua pero defiende el PHN y rechaza el blindaje de los ríos

La nueva presidenta del PP de Castilla-La Mancha y candidata del partido al Gobierno regional, María Dolores de Cospedal, apoyaría que la Comunidad Autónoma tuviera capacidad de decisión en los órganos de gestión del agua, si bien defiende el Plan Hidrológico Nacional (PHN) y el derogado trasvase del Ebro como solución a los problemas de abastecimiento, y rechaza el "blindaje" de los ríos.
Así lo afirmó en una entrevista concedida a Europa Press en la que se mostró convencida de que "no hay nada" actualmente en el borrador de la reforma del Estatuto castellano-manchego que le haga pensar que no se aprobará por consenso, al tiempo que señaló que el Gobierno regional falló en la administración del incendio de Guadalajara del pasado verano, y "en lo que vino después".
De Cospedal comenzó valorando la gestión del presidente de Castilla-La Mancha y contrincante electoral el próximo año, José María Barreda, al asegurar que durante el discurso del Día de la Región del pasado miércoles, estuvo "en su papel de presidente y líder político del PSOE".
"Hay actos que son institucionales y siempre tienen que estar por encima de lo político; hay cosas que dijo que me parecía que estaban bien, y otras cosas que dijo que me parecían menos bien. Algunas creo que no las hubiera dicho de 'motu' propio, pero su partido le pide que las tiene que hacer y decir", interpretó.
De cualquier forma, la líder del PP castellano-manchego afirmó que Barreda abordó problemas importantes de la Comunidad Autónoma como el agua y el Estatuto. Recordó que en esta última cuestión, pidió expresamente el apoyo de los 'populares', al cual se comprometió Cospedal.
Condicionó esta postura del PP-CLM a que la reforma sea con el consenso de los dos principales partidos, a que sea "sensata" y a que se haga para que los castellano-manchegos "puedan vivir mejor y puedan tener una administración más eficaz y cercana". "No voy a apoyar una reforma estatutaria que sea exclusivamente para que un partido se apunte medallas", advirtió, tras pedir que este proyecto sea respetuoso con la Constitución y aborde los problemas "que de verdad interesan a Castilla-La Mancha".
RESPETO AL PACTO DE FUENSALIDA.
Recordó que precisamente estas son las premisas que recogió el Acuerdo de Fuensalida para la reforma del Estatuto, al cual se comprometió De Cospedal a dar continuidad. De hecho, insistió en avisar que, fuera de ese acuerdo, si el PSOE quiere "inspeccionar, o quiere tomar otras aventuras que no sean sobre estos principios, pues entonces ya lo tendríamos que discutir".
Además, la candidata del PP afirmó que el borrador actual todavía es "demasiado básico", pero que dentro de lo que ya conoce, "no hay nada que me haga pensar que no vaya a ser por consenso". "Creo --añadió-- que el PSOE sí que tiene interés en que el Estatuto sea por consenso, y en ello ha insistido Barreda y va a ser fiel a su palabra".
Precisamente, De Cospedal dijo que apoyaría "totalmente" que en el Estatuto se recogiera que Castilla-La Mancha tuviera capacidad de decisión y "algo que decir" en los órganos de gestión del agua, tanto en las confederaciones hidrográficas como en la Comisión de Explotación del trasvase Tajo-Segura. Justificó esta postura en el hecho de que la región "no tiene actualmente la representatividad que necesita y que se merece", y que, por tanto, "es una situación que se tiene arreglar".
No obstante, dejó claro su rechazo al "blindaje" de los ríos, porque "si empezamos poner fronteras geográficas donde no las hay, sería un tremendo disparate". "El agua es un bien precioso y escaso en un país como el nuestro y lo que tenemos que hacer es tener una política nacional del agua que pueda aunar todos los intereses", destacó.
CADUCIDAD DEL TAJO-SEGURA.
Dicho esto, la presidenta del PP-CLM se refirió también al trasvase Tajo-Segura para indicar que su fecha de caducidad puede ser aceptada "siempre que no sea la único que tengamos en política hidráulica", porque "significa enfrentarnos con las regiones vecinas", y las soluciones "tienen que ser integrales".
A su entender, la solución perfecta fue, en su momento el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que aprobó el Gobierno de José María Aznar, y que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "eliminó". Es más, recordó que este proyecto fue firmado por el ex presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, y que en el mismo contemplaba el trasvase del Ebro, hoy derogado, que permitía abastecer a las regiones que hoy toman el agua del Tajo. "Ahora tenemos que ver cuál es la solución, pero eso es una responsabilidad del Gobierno de la nación, no solo del de Castilla-La Mancha", precisó.
En ese sentido, De Cospedal pidió que se vuelva a hacer un PHN y que se vuelva a contemplar el trasvase del Ebro, partiendo de que "todo el mundo que entiende de agua en este país sabe que la derogación del trasvase del Ebro sin haber puesto una solución alternativa, aparte de suponer una pérdida de beneficios económicos, también ha supuesto que no tengamos una solución al problema del agua sobre todo en la zona sureste de España".
Se refirió igualmente a la situación de los pozos ilegales para dejar clara la necesidad de conocer las opiniones de todos los sectores afectados, y para tener en cuenta que el primer destino del agua, tal y como establece la Ley, es para consumo humano y es necesario aunar muchos intereses.
INCENDIO DE GUADALAJARA.
Al margen de estos asuntos, la candidata del PP a la Junta, habló del incendio de Guadalajara del pasado verano, recalcando que una catástrofe como la acontecida es "dramática para todos", pero "cuando se está gestionando una situación así, hay que poner todos los esfuerzos y medios personales y económicos para intentar solucionarlo, y ahí es donde yo creo que falló el Gobierno autonómico", así como "en lo que vino después".
"Cuando pasa algo así, lo primero que hay que hacer es cuidar a los familiares de víctimas, no se puede abandonarlos ni olvidar el daño que han sufrido, ni ningunear el dolor", señaló, agregando que, a su juicio, la Junta tampoco quiso "asumir prácticamente ninguna responsabilidad". "Hubo una dimisión --aseveró-- y con eso se quiso terminar con el problema, cuando el problema continúa ahí y no hay una auténtica concienciación de cuidar el medio ambiente en Castilla-La Mancha".
De Cospedal concluyó remarcando que, en torno a esta cuestión, no permitirá que el PSOE de Castilla-La Mancha "diga que el problema del incendio ha sido por el carroñerismo del PP", porque ha sido su partido el que, a su entender, "ha estado con los familiares en todo momento".